El Squirting es una práctica sexual donde las mujeres durante la masturbación o relación en pareja alcanzan un orgasmo intenso acompañado de un líquido transparente, inoloro, expulsado por la uretra de manera involuntaria (si, por donde sale la orina, por eso algunas describen la experiencia como si te estuvieras haciendo pis).
Seguramente has oído hablar de él o lo has visto en películas porno donde las actrices son un grifo humano expulsando chorros por todos lados… Algunas mujeres afirman haber experimentado el fenómeno del Squirting de forma espontánea, mientras que otras intentan distintas formas de estimulación para provocarlo.
No te obsesiones.
No todas las mujeres llegan a dominar esta práctica a la perfección y es normal, no pasa nada, pero si lo que buscas es divertirte y tener una experiencia extra húmeda es válido que lo intentes.
Squirting Vs Eyaculación femenina
Es importante que sepas que son dos procesos totalmente distintos. La mayoría de los investigadores coinciden en que «La eyaculación femenina es una pequeña cantidad de líquido lechoso y espeso que segrega las glándulas Skene (próstata femenina) durante el orgasmo, la secreción de este fluido tiene un volumen muy «escaso» y, como mucho, llega a representar «la décima parte» del semen que expulsan los hombres durante la eyaculación masculina.
El squirting, en cambio, se define como «la expulsión transuretral orgásmica de una forma de orina que contiene diversas concentraciones de urea, creatinina y ácido úrico». La cantidad que se libera varía significativamente según los distintos estudios, puede ser desde unas gotas hasta 2 tazas de líquido. Investigadores afirman que «ocurre durante la estimulación sexual del complejo clitoro-uretro-vaginal». Incluso lo describen como algo positivo que potencia la vida sexual de la mujer.
¡Yo quiero tener un Squirting!
No te apresures, recuerda que durante el sexo debes mantener tu mente relajada para que tu cuerpo logre entrar a un estado de excitación y de disfrute pleno.
Las técnicas y guías para lograr un Squirt indican que lo más habitual para provocarlo es la estimulación directa del punto G. Puedes ayudarte con tus dedos o juguetes eróticos especialmente diseñados para estimular esta zona.
¿Y cómo lo hago?
Como primer paso estar excitada y lubricada es súper importante, comienza estimulando otras zonas erógenas de tu cuerpo, tumbada sobre tu espalda introduce el dedo medio o dos y con la punta de los dedos haz un gesto de “ven aquí” o “spiderman” tocando la parte superior de la vagina, ahí encontraras el punto G, una pared a la cual puedes darle pequeños golpecitos para despertar increíbles sensaciones, si te dan ganas de hacer pis no pares, continua. Déjate llevar y no te contengas…
Estimulando el Clítoris
Y como no, si este pequeñín solo se encarga de proveernos placer! Muchas mujeres revelan haber tenido un Squirting solo con la estimulación del clítoris, especialmente con la ayuda de algún vibrador o el fabuloso Satisfyer. Sin tantas complicaciones es la manera más fácil de provocar el clímax y posiblemente el tan ansiado chorrito, así que ponte cómoda y lleva una toalla contigo cuando decidas intentarlo!
Una estimulación simultanea de Punto G y Clítoris
Oh si! Aquí la cosa se pone interesante, según los testimonios de mujeres que dominan esta técnica, indiscutiblemente es el método más acertado para conseguir lo que has estado buscando… Puedes combinar juguetes eróticos con la ayuda de tus dedos, o juguetes diseñados para estimular punto g y clítoris de manera simultanea.
De cualquier forma que lo intentes, disfruta el momento, conócete, juega y aprende… Chaíto!